*Por causa de las grandes lluvias caídas en los último días…
Desde el sector advierten que el intenso caudal de agua afectará el rendimiento de los campos. El Gobierno decretó zonas de emergencia
La lluvia se retiró, pero el agua que inundó los suelos continuará provocando trastornos en la población. Operadores y representantes de la actividad agropecuaria indicaron que hubo «daños severos» en los campos, y manifestaron un panorama desalentador para la siembra de soja y el cultivo de trigo.
Fabio Macías, referente de la Sociedad Rural de Bragado, señaló que el exceso de agua «va a producir enfermedades en el trigo, con hongos y otro tipo de padecimientos», por lo que «los rendimientos no van a ser los esperados y estimados».
«El agua que cayó va a hacer muy difícil la capacidad de cosechar y sembrar», indicó al diario Hoy.
La Bolsa de Comercio de Rosario, a través de la Guía Estratégica para el Agro (GEA), indicó ayerque las lluvias registradas durante el fin de semana pasado fueron generalizadas en toda la región núcleo, y totalizaron más de 100 milímetros de agua en el sur santafesino y noreste bonaerense.
«Este fuerte temporal llegó luego de que la falta de humedad paralizara la actividad de siembra de soja y la ola de calor afectara al cultivo de trigo en etapas claves», sostuvo la GEA. Ahora bien, se espera que las fuertes lluvias provoquen nuevas demoras en la implantación de la oleaginosa por la falta de piso y los problemas de acceso a los lotes de las zonas más afectadas.
«Las lluvias que se preveían para el lunes de la semana anterior se retrasaron en gran parte de la región central. El volumen de agua que se esperaba se descargó de forma anticipada en la provincia de Buenos Aires, ocasionando serios problemas de inundaciones que dejaron severos daños en áreas urbanas y rurales», analizó el reporte.
Alertado por este difícil cuadro, el Ministerio de Agricultura de la Nación declaró ayer el estado de «emergencia y/o desastre agropecuario» para varias localidades del interior del país. A través de la resolución 797/2014, el organismo dictó el régimen de excepción por las inundaciones en lospartidos bonaerenses de Lobos, Las Flores, Roque Pérez y de General Paz.
La medida, que otorga beneficios impositivos y financieros, alcanza a «las explotaciones agropecuarias dedicadas a la ganadería bovina lechera y de carne afectadas por inundaciones desde el 1º de abril de 2014 y el 30 de septiembre pasado».
Quedan incluidos bajo el paraguas fiscal y financiero los ganaderos bovinos y emprendedores hortícolas de los departamentos correntinos de Berón de Astrada, Capital, Concepción, Empedrado, General Alvear, General Paz, Itatí, Ituzaingó, Mburucuyá, San Cosme, San Luis del Palmar, San Martín, San Miguel y Santo Tomé.
Para Formosa también hubo beneficios a los productores de algodón, bananas y sandías que tuvieron problemas con sequías, inundaciones o heladas en los departamentos de Pirané, Laishí, Pilcomayo, Patiño y Pilagás.
Pese a los esfuerzos estatales, para Macías el panorama es pesimista. «Los precios a futuro no son nada alentadores, por lo que el panorama para el corto plazo es impredecible, más que nada porque no sabemos cuál es la política que va a regir los próximos meses», afirmó el dirigente de la Sociedad Rural. (DyN/ e Infobae)