Moleskine se asoció con Livescribe para crear cuadernos de paper que simplifican la digitalización de textos manuscritos y dibujos gracias al uso de una birome especial.
Para anotaciones rápidas, para dibujos, para garabatos o simplemente para tomar apuntes, muchos prefieren el papel y la tinta antes que el teclado de la notebook o la tableta. Pero llevar esa información a un formato digital sin rehacer todo suele requerir un scanner o una cámara.
Una alternativa es la que proponen (en Estados Unidos) Moleskine y Livescribe, una compañía que fabrica unas biromes especiales, Smartpens, que cuentan con un micrófono para grabar notas de audio y una cámara en la punta que permite digitalizar, en tiempo real (vía Bluetooth), los trazos que hace el usuario en el papel, que se ven reflejados en una tableta o smartphone.
La novedad está en el uso de símbolos especiales presentes en el papel, que permiten crear etiquetas virtuales para clasificar mejor el dibujo o texto manuscrito que se está digitalizando.
Moleskine ya se había asociado con Evernote para implementar algo similar, pero usando una birome o lápiz convencional: unos stickers en el papel ayudan a su clasificación y reconocimiento cuando se cargan (como foto) en Evernote..