Sociales – María Inés Díaz Lic. en Kinesiólogía recibió su esperada y merecida jubilación

*La Lic. en Kinesiología MARÍA INÉS DIAZ, recibió su ansiada y merecida Jubilación cómo personal del Hospital S.I.L. de Larroque, después de prestar servicios durante más de 40 años. El encuentro en un clima emotivo tuvo lugar el pasado 30 de septiembre en dependencias de la institución de Larroque
Por tan especial motivo la reconocida profesional recibió un emotivo brindis de despedida rodeada de su familia, amistades, el director y compañeros de trabajo.
Desde el diario digital. «Portal Larroque» enviamos a la profesional nuestras Felicitaciones y deseos que tenga una bienaventurada nueva etapa.

*En la oportunidad María Inés, recibió el cariño, el reconocimiento de sus compañeros de trabajo y también palabras de despedida que a continuación transcribimos:

«Toda terminal es también comienzo». Y cuando uno se va de un lugar que amó, en el que puso el alma…. en realidad no se va del todo.
El caminito andado por más de 40 años deste tu casa al hospital…miles de pasos y saludos a los vecinos de siempre, algunos que partieron y sin embargo viven en tu corazón.
Porque el transcurrir o el permancer no es lo mismo que honrar la vida como dice Eladia Blázquez.

La kinesiología, la historia de la kinesiología en Larroque empezó con vos, tuviste que remar para que los médicos entendieran la importancia de la profesión. Iniciaste el servicio en el hospital, en lugarcitos reducidos sin más que una lámpara de infra rojos al principio y creatividad para afrontar los tratamientos. Te supiste ganar el lugar en la institución y en el pueblo. Capacitación permanente, de perfil bajo y con la consigna de visibilizar a los que menos tienen, a los que más necesitan. Porque ésa es tu consigna de vida y la de tu familia. Ésa generosidad que hizo ver a Raúl y su grupo de amigos Veteranos del fútbol la necesidad de una Sala de rehabilitación como la que disfrutamos desde 2016.

Éste lugar te pertenece, nos pertenece, porque ambas sabemos el sentido de pertenencia que tenemos. Porque vimos los muchachos trabajar, porque asistimos a cada cena a beneficio y saboreamos el proceso.
Ésta es tu casa, tu segunda casa y aunque tu impronta, tu personalidad quizá no te deja o no te permita exteriorizar las emociones, tus pesares o alegrías, los que te conocemos sabemos que el día que éste sueño se concretó tuviste la sensación de misión cumplida.

Agradecerte por el compromiso, por la profesión dedicada a los pacientes.
En lo personal, durante 20 años compartidos, con más acuerdos que desacuerdos, aprendimos a respetarnos, escucharnos, consultarnos y a formar un equipo.

Te voy a extrañar, voy a echar de menos nuestras charlas entre paciente y paciente, preocupadas por la situación del país o por las penas de la vida misma. Compartir las alegrías, los logros de nuestro hijos, la llegada de Francisco, que llena tus días de amor y que seguramente el tiempo que restes acá lo sumarás para disfrutarlo.

Un gracias! enorme por tu misión cumplida con creces, porque nadie o casi nadie trabaja 14 años ad honorem, porque pocos ponen el alma en el trabajo 43 años.
Merecido descanso, te esperamos siempre y no olvides que ésta Sala sigue siendo tu casa. Gracias y a disfrutar!!
» (*Celia N. Taffarel, colega y compañera de trabajo)