Recuerdos en el Día del Profesor…
Septiembre tiene fechas relevantes, significativas como el día del 
Maestro, del Estudiante, del Psicopedagogo además de ser el mes que recibe los colores, los perfumes, los soles de primavera. Y ayer 17 de septiembre fue el Día del Profesor quienes recibieron por seguro diversas salutaciones y cálidas palabras.
Es un Día para homenajear y recordar pero por sobre todo agradecer a todos aquellos Profesores/as que marcaron nuestras vidas con un consejo, con su permanente aliento, por enseñarnos a interpretar, analizar, pensar y guiarnos.
Aquellos ilustres hombres que con sencillez nos ayudaron y orientaron a elegir u optar el mejor camino y mientras observaban ya sabían o adivinaban -por su vasta experiencia- nuestras inclinaciones o interés hacia las matemáticas, las ciencias sociales o el arte.
Como no recordar que cuando sonaba la campana -en las horas de algunos de ellos para ir al recreo- nadie se movía del banco, porque las clases eran muy interesantes principalmente porque los alumnos eran 
protagonistas debatiendo e intercambiando pensamientos e ideas.
Queríamos que la hora no finalizara nunca, porque quedábamos atrapados por la creatividad y formas de la didáctica espontánea, por los recursos y sentidas palabras, buenos ejemplos con que se desarrolla la clase. Muchos de Ellos, son responsables de nuestra formación -o en todo caso lo intentaron- pero con el corazón porque llegar a ser un profesor con mayúsculas solo se llega con estudio y sobre todo pasión.
Eran hombres justos y honorables nunca un sobresaliente o un aplazo sin fundamento y ante algún problema no retaban, dialogaban con él alumno o con el grupo buscando la solución. Alguno de ellos ingresaba al aula dejaba y a veces tiraba literalmente su portafolio de cuero marrón sobre el escritorio (Manzanita Bustamante) y decía saquen una hoja para evaluar lo aprendido la clase anterior. Pero era solo una estrategia para que estuviéramos atentos y no nos distrajéramos que estudiáramos porque la semana siguiente seguro que del examen no zafábamos.
Otro profesor recuerdo -reconocido abogado- traje gris impecable desarrollaba historia argentina de un modo muy particular. Durante las clases se estudiaba el tema después explicaba algunas cuestiones y siempre direccionaba la clase produciendo profundos debates entre el alumnado. El profe en todo momento nos hacía razonar, pensar y descubrir causas y consecuencias de los hechos sucedidos o la incidencia en la vida del país de personajes de la historia, notables y de los otros.
Como no nos iba a gustar y animarnos a hurguetear la historia cuándo nos convertimos en adultos habiendo disfrutado de profesores con tanto talento? Como no contagiarse de la pasión con que dictaba sus clases el profesor, escritor de ERSA (Leyes) asignatura que después fue Instrucción Cívica? Jamás leía, ni dictaba… viejos amigos abogados lo valoran y recuerdan por sus conocimientos y por su hombría de bien y porque les señaló rumbos para el estudio universitario. Idioma francés con Madame (Meucci) o matemáticas con la Pata (Uranga) eran barreras infranqueables sin estudio; Madame y Pata nos eran malas eran justas y amaban sus materias. No había otra cosa que estudiar -y en serio- y así de tanto rendir en diciembre o marzo logramos aprender y enriquecer nuestros conocimientos y valorar que hablar un idioma y resolver matemáticas es una importante ventaja.
Otros profesores en cambio manteniendo con hidalguía sus ideales y su dignidad un día se quedaron sin trabajo docente y por pensar distinto debieron partir con rumbo desconocido por temor, corrían serios riesgos. No volvimos a verlos per se extrañaron mucho tiempo sus ausencias pero nadie dio alguna explicación y el tiempo cubrió los rostros con el olvido.
Los profesores nos educaron no solo dictándonos sus materias, sino también brindándonos cultura general haciéndonos reflexionar sobre el saber y la importancia de ello. Sobre todo preparándonos para la vida para que seamos buenas personas, íntegras humildes respetuosas para poder ser respetadas. Y lo valorable, es que de todos algo aprendimos.
Hay cientos de ejemplos, anécdotas para contar que atesoramos con cariño en la memoria que vivimos en las aulas en el patio y hasta en la cantina del secundario. Algunos profes tomaban café mientras charlaban con sus alumnos.
Fueron épocas de aprendizajes y de vivir experiencias enriquecedoras, profesores/as nos instaban a leer, a hacer deportes, a escuchar, interpretar y elegir buena música u otras formas de arte. El tiempo era escaso y no había computadoras, ni tablet, ni cd, internet y menos celular, pero los gurises se las ingeniaban para estudiar, recrearse y divertirse. Y en esto los profe tuvieron mucho que ver.
Pasaron 37 años de aquel día que junto a los compañeros finalizamos aquella hermosa época del secundario dejando las aulas del viejo y entrañable ex Colegio Nacional de Paraná.
Sin embargo las enseñanzas, los aprendizajes que nos brindó aquel grupo de Profesores los llevamos prendidos en el alma y su recuerdo imborrable por habernos brindado con amor y pasión toda su sabiduría. Como no estar a gradecidos??
PD./ *A todos los profesores Muy Feliz Día!! y deseos que lo hayan disfrutado hermoso.
*Mario H. Escobar
ex- alumno Colegio Nacional Paraná
Promoción 1978
Portal Larroque (www.portallarroque.com.ar)