*Rosa Casagrande de Rivero, festeja este «25» de Mayo 100 Años y en medio de esta crisis, es un canto de esperanza, de alegría…
«Vinieron desde lejos…*
*En 1920 Italia, era gobernada por un régimen sustentado en el Facismo surgido tras la primera Guerra Mundial.
Los Italianos oprimidos por la situación socio-económica comenzaron a soñar con nuevos horizontes. Las poblaciones rurales especialmente tenían dificultades para sobrevivir y la Emigración era una alternativa estimulada por el gobierno. Alrededor de siete (7) millones de Italianos Emigraron entre 1860 y 1920. Argentina fue uno de los destinos más importantes de la Inmigración Italiana y quienes se atrevieron eran agricultores, albañiles, zapateros, comerciantes, carpinteros, entre otros.
*Lomadas de mi Entre Ríos…*
Con las maletas cargadas de sueños arribaron al Puerto de Buenos Aires el 17 de Mayo de 1920 Giovanni Casagrande y Augusta Salvador, que más tarde se radicaron en la ciudad de Gualeguay donde tenían familiares.
Augusta, cursaba una embarazo abanzado y a los ochos días del arribo nació Rosa Elsa, un 25 de Mayo de 1920 año bisiesto como el actual- 110 años después de la Revolución con la formación de la Primera Junta de Gobierno.
*Larroque mi canción…*
Tiempo después la familia se radicó en Larroque y su primera morada fue en cercanías del cementerio de la ciudad. Más tarde vivieron en el actual inmueble almacén propiedad de Sfardini – Covre donde tenían un almacén de ramos generales.
La Nona Elsa, tuvo cinco hermanos; a los 27 años contrajo matrimonio con Santos Sebastián Rivero. Luego se radicaron en Villa Eleonora Irazusta formado una familia con seis hijos: Dora, Emma, Ana, Juan José, María Inés y Mario. Su gran familia se completa con trece (13) nietos y veintidos (22) bisnietos. En la década del ’80 se radicaron en Larroque; su actual domicilio esta ubicado en Bv. Francisco Ramírez -frente al parque de la Estación.
«Mi hogar…*
La Nona luego de perder a su compañero, vivió unos meses en el Hogar de Todos del Hospital S.I.L. pero nunca pudo adaptarse, porque añoraba su casa. Más de una vez, la «pícara», se escapó con un atadito con sus pertenencias rumbo a su casa. Tanto insistió que sus hijos decidieron que regresara y allí pasa sus días rodeada de amor, con una lucidez y una memoria brillantes. Canta canciones en Italiano, rememorando su lengua de cuna, esa lengua que sus padres le transmitieron de aquella patria diezmada por la Guerra. También canta canciones en español, el idioma de la tierra que adoptó a tantas familias y que vio nacer y vivir 100 Años a la Nona Rosa, que en un momento tan especial para el mundo está celebrando un Siglo.