«No hay excusas para poder llegar lejos», aseguró el médico santafecino, de 27 años. (La Nación)
SANTA FE.- Leandro Grimaldi Bournissaint es, desde el jueves pasado, el primer argentino con Maestría en la Escuela de Salud Pública de Harvard, seleccionado en 2011 por la Escuela de Medicina de dicha universidad. Es santafecino, y su historia no es común a otros que obtuvieron logros similares. A los 27 años es fellowde investigación en los EE.UU., en uno de los principales hospitales escuela de Harvard, tutor y ayudante de cátedra en dos clases de Escuela de Medicina y de Salud Pública respectivamente; y asiste en la coordinación y desarrollo de workshopsinternacionales para líderes en salud latinoamericanos. También está realizando otro programa dentro de la escuela, para obtener un título en liderazgo.
Integra el Student Leadership Circle, que es un prestigioso círculo que selecciona a los estudiantes con mayor perfil de líderes de las diferentes escuelas de la universidad, y también es vicepresidente de la asociación de Latinos en Salud Pública de Harvard.
«No hay excusas para poder llegar lejos», sostuvo, entre lágrimas, en declaraciones a la prensa santafecina. Sus padres asistieron al acto en la prestigiosa casa de estudios de Estados Unidos. «Ahorraron durante muchos años para poder venir. No se imaginan la emoción de verlos sentados en la universidad, acompañándome», apuntó.
En 2011 fue elegido entre los doce becados, entre más de cuatro mil médicos de toda Latinoamérica, que se presentaron para el programa de la universidad norteamericana. «El proceso de selección fue realmente muy arduo pues uno compite con grandísimos profesionales de diferentes países, con impresionantes currículum y, en muchos casos, una vasta trayectoria. Por eso fue un gran honor y una inmensa alegría cuando, luego de pasar la tercera entrevista, me comunicaron que había quedado seleccionado», recordó en aquel momento, cuando fue recibido por la presidenta Cristina Kirchner.
Nació en el barrio de Barranquitas (noroeste del municipio), de familias modestas. «Tuve la fortuna de crecer en una familia muy rica, pero sin dinero. Rica en valores y en todas las enseñanzas de vida que me fueron transmitiendo siempre, en base a eso he podido construir una plataforma sólida para poder soñar y para poder entender que no hay excusas para poder llegar lejos», insistió.
Estudió medicina en la Universidad Nacional de Rosario (UNR). Aún como estudiante realizó un intercambio médico en la Universidad de Pennsylvania, y ya como graduado, realizó un entrenamiento en el Jackson Medical Hospital como parte de una beca otorgada por la Universidad de Miami.
«Este es el sueño hecho realidad. Me costó mucho sacrificio llegar a conseguir esto. Pasé por muchos momentos difíciles donde todo mi sueño parecía caerse a pedazos. Pero estoy convencido que seré una herramienta más para ayudar en el futuro a quienes menos tienen. Por esa razón siento que valió la pena tanto esfuerzo», concluyó.
