21/10- Polonia – Utilizaron un innovador trasplante de células. El hombre, de 40 años, es la primera persona en el mundo que se recuperó de un desgarramiento de los nervios de la columna.
Un hombre que estaba paralizado de la cintura hacia abajo volvió a caminar después de someterse a una terapia pionera de trasplante de células en una operación sin precedentes en Polonia. Según un artículo publicado en la revista científica Cell Cell Transplantation, esto lo convierte en la primera persona en el mundo que se recupera de un desgarramiento total de los nervios de la columna vertebral.
El búlgaro Darek Fidyka, de 40 años, quedó paralizado desde el pecho hacia abajo después de recibir varias puñaladas en la espalda. Cuatro años después de ser agredido, Fidyka ahora puede caminar con un andador, hacer vida normal e incluso conducir un automóvil gracias a un trasplante de células e su cavidad nasal a la médula espinal. «Cuando comienza a volver, se siente uno revivir, es como si naciera nuevamente. Es una sensación increíble, difícil de describir», declaró el hombre en el programa Panorama de la BBC, que tuvo un acceso exclusivo al paciente y a los médicos.
La operación fue realizada por un equipo de doctores polacos dirigidos por el Dr. Pawel Tabakow, en el Hospital Universitario de Breslavia. Para el revolucionario tratamiento, los cirujanos utilizaron células especiales que forman parte del sentido del olfato y que se llaman células de glía envolvente olfativas (OEC, por sus siglas en inglés), que facilitan que las fibras nerviosas en el sistema olfativo se renueven de forma continua.
«Para mí, todavía es más impresionante que los primeros pasos del ser humano en la Luna», aseguró el profesor Geoffrey Raisman, responsable del Instituto de Neurología del University College de Londres (UCL).
En la primera de las dos intervenciones, los médicos le quitaron uno de los bulbos olfatorios y cultivaron las células. Unas semanas después, se realizó el trasplante a la médula espinal, dañada tras haber sido atravesada por la navaja.
Al paciente se le realizaron alrededor de 100 microinyecciones de OEC por encima y por debajo de la lesión, y se utilizaron cuatro tiras finas de tejido nervioso, extraídas del tobillo del paciente, que se colocaron sobre un espacio de 8 milímetros en el lado izquierdo de la médula espinal.
«Nosotros pensamos que este procedimiento es un descubrimiento capital que, si se desarrolla, constituirá un cambio histórico para las personas que sufren de heridas de la columna vertebral», declaró Raisman.
Después del trasplante de células, Fidyka realizó un programa de ejercicios de cinco horas diarias, cinco veces por semana, en el Centro de Rehabilitación Neuronal de Breslavia (Polonia). Los resultados se empezaron a ver a los tres meses, cuando su muslo izquierdo comenzó a desarrollar músculo.
«Es increíble ver cómo la regeneración de la médula espinal, algo que hace años se pensaba que era imposible, se está volviendo una realidad», afirmó el neurocirujano Tabakow.
Seis meses después de la cirugía, Fidyka pudo dar sus primeros pasos ayudado de barras paralelas que le servían de soporte y de aparatos en las piernas y gracias al apoyo de un fisioterapeuta.
Dos años después, el hombre puede caminar ayudado de un andador fuera del centro de rehabilitación y ha recuperado parte de las sensaciones en la vejiga y el intestino, así como la función sexual.
Fuente: EFE y AP