7/08/2014- Su segundo nombre es Cayetana, tal como indica el calendario. Tiene más de 105 bisnietos y aseguran que el secreto de su longevidad siempre ha sido la simpleza y el buen humor.
Fausta Cayetana Juliana Cardozo, nació un 7 de agosto pero del año 1912. Es la habitante más longeva del Gobernador Mansilla, donde ha pasado casi la totalidad de sus 102 años.
Tuvo 7 hijos, 35 nietos y 105 bisnietos que además seguramente sumen a la familia, una importante suma de tataranietos; más allá las infinitas líneas parentales que trazó en su centenaria vida, para todos es simplemente “la abuela Fausta”, tal como contaron -a Uno- Iván y Ludmila Sacks, dos de sus bisnietos.
“Para nosotros es un gran ejemplo de vida; era muy pobre, pero muy trabajadora. A sus hijos y a algunos de los nietos que le tocó criar, jamás les faltó nada. Por eso la amamos tanto y cada vez que podemos nos reunimos todos y ella se pone feliz de vernos” cuenta Ludmila, visiblemente orgullosa de su bisabuela. Cuentan que Fausta toda su vida trabajó lavando y planchando la ropa de las familias más acomodadas de la zona y que el fruto de su trabajo fue el único sostén de su familia. Sobre cómo llegó Fausta a las tres cifras, Iván expresa: “el secreto probablemente sea vivir en un lugar tranquilo y con la mente un poco más limpia, con mucha simpleza”, por su parte Ludmila agrega que la abuela siempre tuvo un gran sentido del humor.
En Mansilla es casi una celebridad. En el año 2012, en su cumpleaños N°100 fue homenajeada por el municipio y por todos los vecinos del pueblo, para quienes ya es costumbre acercarse a saludar cada 7 de agosto y a quienes la mujer, recibe agradecida y emocionada.
Actualmente Fausta está jubilada. Dicen que se alimenta sanamente y de vez en cuando, bebe un vasito de vino tinto con el almuerzo. Con algunos achaques, pero siempre de pie, este año Fausta vuelve a reunir legiones de familiares, vecinos y amigos de toda la vida; ya no se reúnen a festejar un año más de vida, sino su vida entera. (Fte.– Uno / Paraná)