La marca de teléfonos finlandesa Nokia, reina mundial del mercado hasta el año 2012 -cuando fue superada por Samsung-, dejará de existir bajo ese nombre al menos en productos de telefonía móvil. Esto es una consecuencia de la adquisición por parte de Microsoft, cuya transacción finalizará de forma inminente.
La compra de Nokia por parte de la empresa fundada por Gates comenzó a gestarse a mediados del 2013, y requirió de muchas validaciones e instancias legales que requerían autorización de entes tales como el Ministerio de Comercio de China, la Comisión Europea y el departamento estadounidense de Justicia. El cambio de nombre responde a que Nokia piensa seguir fabricando componentes orientados hacia otro tipo de mercado, como es el de redes y hardware asociado.
Microsoft hace, con esto, una movida importante de cara a su salvaje competencia con Google –recordemos que este último adquirió Motorola-, Samsung y Apple. Los primeros indicios de estos movimientos los pudimos ver quienes notamos que cada vez aparecían más modelos Nokia con el sistema operativo Windows Phone. De todas formas, se espera que recién a fines de este año comiencen a llegar los primeros equipos con la nueva marca, ya que aún existen varios proyectos de lanzamientos bajo la marca Nokia.
Es el fin de una empresa que marcó su diferencia en muchos de nosotros con los populares modelos 1100, que eran casi indestructibles. Queda por ver qué destino tiene esta nueva rama del gigante Microsoft, que nos tiene acostumbrados a grandes apuestas que no siempre terminan en buen puerto.