23/05/2019 – El Juez Giorgio, explicó que no hubo estudios científicos que avalen la postura del agro. A su vez la Mesa de Enlace logró una importante movilización frente a Tribunales que luego se mudó a Casa de Gobierno.
Giorgio le respondió a un productor que había calificado como “demagógico” el fallo.
*La Mesa de Enlace Entre Ríos realizó una importante movilización frente a Tribunales manifestando su repudio al fallo judicial que consideró nulo el decreto del gobernador Gustavo Bordet y que dejó en plena vigencia la prohibición para fumigar con agrotóxicos en inmediaciones de escuelas rurales. En plena asamblea, diez dirigentes del campo fueron recibidos por algunos de los vocales del Superior Tribunal de Justicia (STJ) liderados por el presidente del órgano Emilio Castrillón. Allí también estuvo presente el integrante de la Sala Penal del STJ, Miguel Ángel Giorgio, quien fue el juez que fundó el fallo.
Según observó Análisis Digital, Giorgio le respondió a un productor que había calificado como “demagógico” el fallo judicial y le explicó: “A mí me traen un dilema que es la producción o la salud. Ante ese dilema, nosotros tenemos una jerarquía de bienes y por eso elijo el bien superior que es la salud”.
En esa línea, respondió también a las calificaciones realizadas por productores (dentro y fuera de la reunión) respecto a las distancias que limitan el uso de venenos para la producción: «Los mil y tres mil metros no fueron antojadizos, están en el digesto que dice que en los centros urbanos no se puede fumigar a una distancia de mil metros vía terrestre y tres mil metros vía aérea». Además, les explicó la carencia de estudios científicos que despejen las dudas respecto al carácter nocivo de los agrotóxicos: «Lo que hay que hacer es un estudio acabado, científico, que demuestre sin dudas que se puede fumigar a una distancia menor. Eso es simplemente lo que queremos, lo que se pretendió y el argumento del fallo».
Los distintos sectores de la Mesa de Enlace Entre Ríos lograron una importante concentración frente al palacio de Tribunales este jueves por la mañana. Los productores llegaron en dos partes dirigentes de la Sociedad Rural y la Confederaciones Rurales Argentinas se dirigieron directamente a calle Laprida mientras que las entidades que representan a pequeños y medianos productores arribaron desde el Acceso Norte. Como referentes se pudo observar a Juan Diego Etchevehere, a José Chemes, Elvio Guía y Alfredo Bel, entre otros.
Con discursos encendidos, distintos productores manifestaron su repudio al fallo judicial y expresaron su enojo ante los límites dispuestos por el Poder Judicial de Entre Ríos para fumigar con tóxicos en inmediaciones de escuelas rurales. A pesar de lo que dicen los dirigentes, cada productor que habló rechazó de plano la posibilidad de ir hacia la agroecología asegurando que «no es viable».
En medio de la asamblea, diez dirigentes del agro fueron recibidos por el presidente del Superior Tribunal de Justicia (STJ) Emilio Castrillón y los vocales Martín Carbonell, Bernardo Salduna y Miguel Ángel Giorgio en el salón del cuarto piso de Tribunales. La presencia de Giorgio es clave, ya que es el juez que argumentó la resolución de la Sala Penal que confirmó la prohibición de fumigar a tres mil metros (vía aérea) y a mil metros (vía terrestre) de inmediaciones de establecimientos educativos rurales.
Los productores lograron expresar sus visiones pero se encontraron con los argumentos técnicos de los máximos jueces de la provincia. Castrillón les explicó que a pesar de su posicionamiento personal, los jueces que resolvieron la cuestión lo hicieron en base a los elementos presentados por las partes. Cabe recordar que ninguna entidad agraria forma parte del expediente, sino que es el Poder Ejecutivo a través de Fiscalía de Estado quienes defienden los intereses del agronegocio.
Las entidades -y los productores que esperaban afuera- esperaban una respuesta efectiva y rápida de las máximas autoridades judiciales, pero esto era desde el principio algo inviable. La Justicia entrerriana ya había hablado mediante sus fallos y ahora restaban dos caminos: la salida política y la instancia de Corte Suprema de Justicia.
Pero sin lugar a dudas el momento de mayor tensión se vivió cuando uno de los productores, representante de la Federación del Citrus de la provincia, calificó el fallo judicial como «demagógico» ante los propios magistrados. El guante lo recogió el propio Giorgio, quien tomó la palabra por única vez y les explicó: «Yo soy el autor del voto que usted dijo que es demagógico y yo no lo comparto», comenzó el magistrado.
Ante la intención del productor de desmentir sus propias palabras, el juez fustigó: «Yo lo escuché, dejeme hablar a mí. En primer lugar, a mi me traen un dilema que es la producción o la salud. Ante ese dilema, nosotros tenemos una jerarquía de bienes y por eso elijo el bien superior que es la salud. Lo demás fue precautorio, siguiendo la Ley General del Ambiente», explicó.
Giorgio también explicó los argumentos respecto a las distancias establecidas como límite, ya que tanto afuera como adentro de la reunión se puntualizó en la crítica y se había asegurado que era una medida «antojadiza, caprichosa y sin fundamentos». «Los mil y tres mil metros no fueron antojadizos, están en el digesto que dice que en los centros urbanos no se puede fumigar a una distancia de mil metros vía terrestre y tres mil metros vía aérea. Es decir, que si en los centros urbanos donde habitan personas no se puede fumigar a esa distancia, debemos colegir que en los colegios habitan personas», explicó el magistrado. A lo que Carbonell reafirmó: «No es caprichoso».
Giorgio continuó explicando: «Todo eso fue precautorio y para que con los estudios científicos correspondientes se pudiera establecer una distancia menor. A mi óptica, no se satisfizo suficientemente ese estudio técnico. Es decir, no solamente acá tiene que opinar un ingeniero agrónomo. Yo tengo sobrinos que son ingenieros agrónomos, mis hermanos son productores agropecuarios y mi padre fue secretario de Federación Agraria Argentina. Es decir, volviendo al tema, lo que hay que hacer es un estudio acabado, científico, que demuestre sin dudas que se puede fumigar a una distancia menor. Eso es simplemente lo que queremos, lo que se pretendió y el argumento del fallo».
«Yo no considero que haya sido demagógico velar por la salud de todos. Tenemos un dilema acá, la producción o la salud. Si a mi me ponen en ese dilema, yo siempre voy a elegir la salud. Ante la duda no podemos autorizar eso. Si me traen un estudio científico y comprobado que no hace daño, perfecto», agregó.
Ante eso, uno de los productores les preguntó: «¿Pero los estudios de los cuatro ministerios no se los llevaron a ustedes?». La respuesta de Giorgio fue concreta: «Los que vimos, no fueron suficientes». En el dialogo, el productor le explicó que el mismo en persona les llevó esos estudios al Fiscal de Estado para que los tenga como herramienta en el proceso judicial. Giorgio le respondió marcando una postura ilógica por parte de la defensa procesal de la postura del agro: «Fíjese la ilogicidad que se dice que a 150 metros se debe hacer una barrera natural y se dispone que se puede fumigar a 100 metros, es decir dentro de la barrera natural», analizó Giorgio respecto al decreto del gobernador Gustavo Bordet.
«Creo que la solución no está en manos de un solo poder. Esto nos excede en parte a nosotros. Acá se deben sentar los tres poderes para trabajar en el tema cuanto antes», explicó Giorgio.
Los productores le preguntaron si el Poder Judicial podía instar al Ejecutivo y Castrillón respondió contunde que no. Al obtener esta respuesta infructuosa para los intereses de las entidades agrarias y sin ocultar su malestar, los dirigentes retornaron a la asamblea y si bien destacaron en el encuentro, concluyeron que las respuestas las debían dar los poderes Legislativo y Ejecutivo. Fue por esto que los productores decidieron cruzar la plaza que separa Tribunales de Casa de Gobierno y entregar el petitorio formal al gobernador y los legisladores.
Sin embargo, los productores insistían a los gritos para poder pasar o ser recibidos por alguna autoridad. Luego de anoticiarse que no había funcionarios de alto rango con la posibilidad de recibir a los productores, Alfredo Bel comenzó las gestiones para que al menos los reciba el bloque de senadores de Cambiemos para «calmar los ánimos». De hecho, mientras se desarrollaba la asamblea fue el propio Bel el que informó a los productores que los senadores de Cambiemos estaban reunidos mientras tanto con algunos productores para hablar sobre los reclamos. (Por JCB. de Análisis Digital) / (Fotos: Anál.Dig.)
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