«25 de Mayo» – Larroque conmemoró el 210º Aniversario de la Revolución.

*El Acto oficial con las normas preestablecidas de prevención tuvo lugar en Plaza San martín este lunes 25 de Mayo dando inicio a la hora 11.

La Municipalidad de Larroque conmemoró el 210 Aniversario de la Revolución de Mayo de 1810, en un acto organizado en la Plaza San Martín, sin público y presidido por el intendente Leonardo Hassell, el diputado nacional, Atilio Benedetti; el juez de paz, Ricardo Chaia; el Jefe de la Comisaría local, Comisario César Giménez, un concejal representando a  cada bloque y secretarios municipales.

El evento, que se compartió a través de las redes sociales y fue conducido por Analía Duarte, secretaria de Gestión Cultural y Educación, se desarrolló con la entonación del Himno Nacional, la Marcha de Entre Ríos y palabras alusivas a cargo del juez de Paz de Larroque, Ricardo Chaia.

         Conmemorar las fechas tan caras para la Patria

En ellas, destacó lo fundamental que es “para un país mantener viva su historia, sus tradiciones, desentrañar de dónde venimos, recrear en las nuevas generaciones ese pasado de grandes gestas y de grandes hombres que hicieron posible el nacimiento de nuestra Nación, la Argentina”.  

En ese sentido remarcó “Para mantener esa llama viva, es necesario no olvidarnos de recordar a nuestros próceres, de realzar nuestros símbolos y de conmemorar los aniversarios de fechas tan caras para la Patria, como la que conmemoramos hoy, la del 25 de mayo de 1810”.

Recordó luego los acontecimientos previos en Europa que llevaron a la gesta de mayo y como fueron desarrollándose los sucesos, fundamentalmente de la resistencia que hubo “lo que fue necesario el concurso de ´la fuerza y la palabra´, la de los cuarteles representada en los Patricios con Cornelio Saavedra a la cabeza, como la de la calle con French y Berutti, que se encargaron de movilizar y mantener al pueblo frente al Cabildo. Y como fundamento, las ideas, que se discutían fundamentalmente en la Jabonería de Vieytes, resultando Castelli el orador de la Revolución, su exponente máximo, acompañados por la razón y la pluma valiente de Moreno y de Belgrano y de otros tantos héroes anónimos que hicieron posible que, para reemplazar al Virrey se forme una Junta de Gobierno integrada por militares, abogados, comerciantes, sacerdotes, etc. que expresaba el sentir de los criollos”.

25 de Mayo extraño…

No dejó de mencionar el momento actual que vivimos con la pandemia del coronavirus, que hace que “este 25 de Mayo resulta extraño, distinto, con una plaza vacía, sin gente, donde a la par de la tradicional escarapela le debemos agregar otro símbolo, propio de estos tiempos: el barbijo”.

Así, destacó “la unidad de los distintos actores sociales y políticos, el esfuerzo de todos y todas, especialmente de los chicos y de los abuelos, fundamentalmente el trabajo y compromiso del personal de salud y de las fuerzas de seguridad, del esfuerzo económico de muchos…en definitiva, se lo está combatiendo con solidaridad, con seriedad, con sacrificio…que nos hacen pensar que, más tarde o más temprano, todo esto haya sido un mal sueño”. 

Oda final alusiva

Finalmente, Duarte, cerró el acto con un escrito de Jorge Luis Borges:

Titulado: Oda por el Sesquicentenario

Nadie es la Patria.

Ni      siquiera      el       jinete que,   alto   en el alba    de      una    plaza desierta, rige         un     corcel          de bronce por      el       tiempo, ni los       otros que    miran desde         el       mármol, ni los     que    prodigaron su      bélica ceniza por   los     campos         de América o       dejaron un verso  o       una    hazaña o     la memoria de      una         vida   cabal en el justo   ejercicio      de      los     días. 

Nadie es      la       patria.

Ni      siquiera      los     símbolos.

Nadie es      la       patria.        Ni     siquiera      el       tiempo cargado    de batallas, de         espadas      y       de      éxodos y     de      la       lenta población    de      regiones que         lindan         con    la       aurora y el ocaso, y      de      rostros        que    van         envejeciendo en    los espejos que    se      empañan y de      sufridas      agonías         anónimas que duran      hasta el       alba y         de      la       telaraña      de      la         lluvia sobre negros        jardines.

La     patria,        amigos,      es      un     acto   perpetuo como    el perpetuo mundo.         (Si     el       Eterno Espectador        dejara         de      soñarnos un         solo instante,     nos    fulminaría, blanco         y       brusco        relámpago, Su olvido.)

Nadie es la patria, pero  todos debemos ser dignos del antiguo  juramento que  prestaron aquellos caballeros de ser lo que ignoraban,         argentinos, de      ser     lo      que    serían         por    el hecho      de      haber         jurado         en      esa    vieja  casa.

Somos el porvenir de esos varones, la  justificación de aquellos muertos; nuestro  deber es la gloriosa carga que a nuestra sombra llegan esas sombras que debemos salvar.

Nadie es la Patria, pero todos lo somos.      

Arda en mi pecho y en el vuestro, incesante, ese límpido fuero misterioso.

Discurso completo del doctor Ricardo Chaia:

Resulta fundamental para un país mantener viva su historia, sus tradiciones, desentrañar de donde venimos, recrear en las nuevas generaciones ese pasado de grandes gestas y de grandes hombres que hicieron posible el nacimiento de nuestra Nación, la Argentina. 

Para mantener esa llama viva, es necesario no olvidarnos de recordar a nuestros próceres, de realzar nuestros símbolos y de conmemorar los aniversarios de fechas tan caras para la Patria, como la que conmemoramos hoy, la del 25 de mayo de 1810.

Para abordar la revolución de Mayo, debemos entender en principio los distintos hechos que la precedieron, así tenemos un contexto geopolítico favorable por la caída del rey Fernando de España en manos de las tropas napoleónicas, el interés económico, cambiar el monopolio con España por el libre comercio con otros países, la reciente creación de milicias que se formaron para rechazar a los ingleses en 1806 y 1807, la movilidad social y política ascendente del criollo –esto es el nacido en América-, las ideas propagadas por la Revolución Francesa y los movimientos independestistas regionales, como  el de Chuquisaca y La Paz.

Esa semana, le “previa del 25”, hubo una seguidilla de hechos que conocemos, así el Virrey Cisneros y los funcionarios que respondían a los intereses españoles intentaron “atalonarse”, preservar su autoridad, lo que fue necesario el concurso de “la fuerza y la palabra”, la de los cuarteles representada en los Patricios con Cornelio Saavedra a la cabeza, como la de la calle con French y Berutti, que se encargaron de movilizar y mantener al pueblo frente al Cabildo. Y como fundamento, las ideas, que se discutían fundamentalmente en la Jabonería de Vieytes, resultando Castelli el orador de la Revolución, su exponente máximo, acompañados por la razón y la pluma valiente de Moreno y de Belgrano y de otros tantos héroes anónimos que hicieron posible que, para reemplazar al Virrey se forme una Junta de Gobierno integrada por militares, abogados, comerciantes, sacerdotes, etc. que expresaba el sentir de los criollos.

Podemos decir entonces que el significado mayor que tiene el 25 de mayo de 1810 es el de haber formado el primer gobierno en estas tierras con autonomía de España. Y fue el camino inicial, con enfrentamientos y diferencias, para llegar a la ansiada independencia el 9 de julio de 1816.

Este 25 de Mayo resulta extraño, distinto, con una plaza vacía, sin gente, donde a la par de la tradicional escarapela le debemos agregar otro símbolo, propio de estos tiempos: el barbijo. Hoy nuestro país y el mundo tienen un enemigo común, el Covid-19, invisible, al que es imperioso vencer, ese enemigo circula en forma silenciosa y peligrosa, ya nos han instruido de las armas para enfrentarlo. Las individuales: aislamiento, higiene personal, poca circulación. Pero hay otras armas que parecen estar funcionando. Como la unidad de los distintos actores sociales y políticos, el esfuerzo de todos y todas, especialmente de los chicos y de los abuelos, fundamentalmente el trabajo y compromiso del personal de salud y de las fuerzas de seguridad, del esfuerzo económico de muchos…en definitiva, se lo está combatiendo con solidaridad, con seriedad, con sacrificio…que nos hacen pensar que, mas tarde o más temprano, todo esto haya sido un mal sueño. 

Por último reflexionar que si el significado de la gesta de mayo apuntó a unirse y luchar contra un enemigo común para tener una Patria libre e independiente, hoy este 25 de mayo nos interpela y nos señala que debemos continuar unidos, cuidándonos y cuidando al otro,. El otro también es la Patria. Todos juntos hacia un camino que debe ser amplio. Hacia una Argentina  más libre y más justa.